jueves, 3 de noviembre de 2011

Pensamientos de una desempleada más



Esta mañana cuando he dejado a mi hijo en el colegio, me encuentro con otra mamá: 
-¡¡Hola!!
-¡¡Hola!! ¿qué tal,  cómo estás?
- Pues mira, ya no trabajo
- ¡Ostras! Pues yo tampoco

De ser un saludo corto, ha pasado a ser una conversación de 20 minutos ¿y qué ha pasado? ¿y ahora qué vas a hacer? ¿Dónde vas a buscar trabajo? Se me ha ocurrido, he pensado en…

Cuando oyen que vas a trabajar tu reputación en Internet,  para encontrar trabajo, se quedan con cara de “esto yo no lo puedo hacer”, “esta debe ser una entendida” o  “esto no está  a mi alcance”, y no estoy hablando de personas que sean neófitas tecnológicamente, que incluso ¡tienen una cuenta en Facebook!

Estar en el paro,  te acerca a las personas, pero ¿estas son las personas que te interesan en estos momentos de la vida? Para mí son personas y valen por ello y no por lo que puedo conseguir de ellas. Quizá sean ellas las que deban obtener algo de mí.

Pero una cosa está clara, me he sentido un poco menos sola, menos perdida, por un segundo, cuando hablo con otras personas y veo que mucha gente de mi entorno está igual que yo. Pero inmediatamente me asaltan los pensamientos de que somos una masa de gente, perdida, que tras los primeros intentos de hacer cosas, y ver que no tienen resultado, volvemos a quedarnos inmovilizados sin saber qué hacer.   

Yo misma, no he parado de hacer cosas, incluso puedo decir que no he parado de trabajar, pero todo por mi cuenta, no he podido volver al antiguo modelo (contrato indefinido, 1600 € mes, sin pagas, con vacaciones pagadas y derecho a 4 míseros meses de baja por maternidad, jornada completa de 9 a 18h, y frecuentemente más). 

Por cierto, hace unos meses estuve en una charla sobre reputación online, con Francesc Grau, Sergio Ibáñez y Pedro Rojas, en Porta22, (vinculo) muy interesante, en el que nos dieron unas pautas básicas sobre cómo trabajar nuestra reputación, orientarla profesionalmente, que hacer primero y que hacer segundo y no al revés. Me quedo con un planteamiento de cada interlocutor:

-      -  Es importante la actitud en la red, conocer las normas de comportamiento y funcionamiento de cada una. “Conocer la red, probar cosas, experimentar”.
-         -  Las recomendaciones son vitales. “la reputación es la moneda que nos permite avanzar”
-       -   Para empezar, trabaja tu perfil profesional en Xing o Linkedin y un blog que aporte un valor sobre el tema que mejor domines.

Pero ¡atención! Llega una oportunidad de volver al modelo antiguo. Bueno…las condiciones no son las mismas: 1.100€, horarios extensivos, trabajo interminable, empresa pequeña pero con potencial de crecimiento…tengo dudas…

¿Porqué tengo dudas, si es lo que he estado buscando durante un año que llevo en el paro? Porque quiero disfrutar de mi hijo de 3 años, y del que viene en camino (no, no os penséis que tengo otros ingresos, mi pareja cobra 1200€, y pago una hipoteca de 800 € mensuales  y no tengo familiares que aporten capital).

A mis casi 40 años, valorando que es lo importante en la vida, llego a la conclusión que es disfrutar de mis hijos y de mi pareja y hacerles disfrutar a ellos también. Si hay que apretarse el cinturón más, se apreta, si tengo que moverme mucho más para tener trabajillos por libre, me moveré, pero a las 17h quiero estar con mi hijo y disfrutar de su sonrisa.

P.D: Con efecto retroactivo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario